Editorial: "Algo que tú y yo sabemos"

Salir, tocar para verte sonreír,
coger al vuelo el sentido de vivir.
Y después, a la hora de volver
conservar el secreto en mi poder.
Un viaje más, olvidar la luz de un bar,
durmiendo mal y soñando con cantar.
Y después, a la hora de volver,
conservar el secreto en mi poder.
Sólo al finaltiene sentido la soledad,
cuando el silencio es total
no queda nadie en el local
Mil caras que estudiar,
mil caras que olvidar.
Correr, sudar,
no hay manera de engordar,
sobrevivir al veneno de tocar.
Sólo al final cobra sentido la soledad,
cuando el silencio es total
queda el espacio para pensar.
Y después, a la hora de volver,
conservar el secreto en mi poder.
Algo que tú y yo sabemos.
Algo entre tú y yo, no hablemos.


Bienvenidos a Recovecos en la 93.0 y en la 99.7 de tu dial y a través del ciberespacio en onradio.es.
Este ha sido nuestro homenaje a “Lo que tú y yo sabemos” de Antonio Vega. Porque en estos Recovecos encontré el sitio de mi recreo y el de muchos de los que conmigo creen que en el azul todos nos dejamos llevar. Muchos hemos encontrado en sus letras “el elixir de la juventud”. La inquietud se convierte en el arma infalible en la “lucha de gigantes” porque “esperando nada” aún queda “lo mejor de nuestra vida. Por ello me quedo contigo porque quizás, no sea demasiado tarde para comprender que siempre hay canciones que consiguen que te pueda amar.
Quedan hoy “las lágrimas al suelo. Desaparecieron. Nunca más le vieron”. Hoy porque sí y porque afortunadamente muchas de sus letras e historias se han tatuado en nuestra memoria hasta tal punto de que en un cerrar de ojo parece que tacháramos el tiempo. Por todo ello, “me quedo contigo” y con Antonio Vega.
Esto es Recovecos y quien les habla Natalia Guillén.

DESPEDIDA
Con esta precipitación acabamos estos recovecos de mayo en uno de tantos miércoles en los que venimos a encontrarnos en el sitio de nuestro recreo. Gracias por hacer crecer estos Recovecos. Sólo el que oye hace que lo que suceda aquí viva. Sólo su escucha consigue que el aire se irradie en vida a través de estos pulmones mecánicos que escupen ondas para que ustedes y los que hacemos Recovecos creemos un puente de ida y vuelta. Ahora los dejamos con “la calle habla”.
Susurros teñidos de luz
Persianas que tamizan la luz directa
Persianas que convierten la luz en ambiente
Para que el ataque se transforme en seducción
Esta emisora se torna en una persiana que permite que nos vean sin que los veamos. Y a través de ella se selecciona la mirada. Usted el voyeur y nosotros los observados con el ojo de las ondas.
Pero gracias a ustedes cada palabra es un reto a ti debido
Esto ha sido Recovecos, se despide quien les habla Natalia Guillén